Últimas doce semanas en flashback
Hace días que no sé lo que es el silencio.
1.
El peso de las cosas.
El viento, el aire que se va moviendo.
Lo que se enciende, lo que se apaga.
Lo que se acumula hasta estallar.
Un día, solo edito. Y antes de dormir,
se me cruza un pensamiento:
es un delirio que vivamos de hacer películas.
2.
El Bañado de las Estrellas, en Formosa,
parece un lugar de otro planeta.
La cámara acaricia los bosques, llega al agua,
viaja arriba de una canoa junto al personaje.
Hasta que cae el crepúsculo.
3.
Una primera niña que nace.
Ser tres en vez de dos.
Hacer una casa.
Construir quiénes somos.
¿Quién dijo que hablar de la propia vida
era más fácil que hablar de la de otros?
4.
El martes a la nochecita
vamos al cine con uno de mis directores.
Caminamos cuadras enteras
debajo del cielo de agosto
y de la garúa.
Entramos a la sala, nos sentamos.
Entre los guantes y el estuche de mis lentes,
pude sentir el frío del metal:
aún llevaba una tijera en la mano.
Tuve miedo.
¿Y si el encanto, un día, desaparece?