Entre el inicio y el fin
Justo estoy en esos pedacitos de tiempo en que se vuelve simultáneo cerrar por un lado y abrir por otro. Hacer un corte final el sábado, cuando el viernes había editado las dos primeras escenas de otra película y hoy tenía que retomar una consultoría de montaje. Los días se ven atravesados por ese ir y venir de cosas empezadas y a punto de terminar. Esta semana también acabará el rodaje de la película del pintor. Y di una de las últimas clases de Bella Tarea.
Lo que se abre con cada pequeña pausa es la posibilidad de detener la vorágine y pensarme de nuevo. En las cosas que quiero y las que no. Seguir afinando el foco: hacia allá vamos. Entonces, algo se clarifica: esta película ya pasó a post. Me he liberado de ella. ¿Qué deseo ahora?, ¿dónde seguir poniendo mis energías y mi tiempo?
Ensayo una primera hipótesis: me interesa más la mirada de los directores y las directoras con quienes trabajo que el tema o los personajes que han decidido filmar. Dos: ya no quiero habitar proyectos donde no logro construir un lenguaje común con mis directores. Tres: qué hermoso cuando me siento afortunada de trabajar en las películas que me llegan, como si estar mirando ese material y tenerlo entre mis manos fuese un premio.
Quiero que siempre me den confianza para trabajar.
Quiero que no vuelvan a dejarme sola.